En retrospectiva: ¿cuáles fueron los tipos de Vespas Antiguas en Italia?

En retrospectiva: ¿cuáles fueron los tipos de vespas antiguas?

Vespa es un referente en movilidad sobre dos ruedas y la marca más laureada y popular entre los aficionados a las motos escúter. El pasado año celebró su 75 aniversario, y no cabe duda de que aún le queda un largo camino por delante. Una forma de rendir tributo a este icono desarrollado por Corradino D’Ascanio a petición de Enrico Piaggio es repasar las vespas clásicas que dejaron su huella en la historia.

Los modelos GS, 50, Primavera, 125 ó 98 no figuran entre los tipos de vespas antiguas más reconocidos por casualidad. Además de ser un éxito en ventas, gozaron del favor de varias generaciones de motoristas, incluida la actual, pues estas escúteres se siguen comercializando con diseños y prestaciones adaptadas a los nuevos tiempos.

6 clases de vespa clásica que marcaron (y siguen marcando) época

Vespa 98: el origen de la ‘avispa’

Todo tiene un comienzo, y el de Vespa fue la 98, una motocicleta de 98 cc presentada el 23 de abril de 1946, que también es la fecha fundacional de la marca. Esta escúter de 3,2 CV y una velocidad máxima de 60 km/h se tardó dos años en fabricar y contó con un lanzamiento de 5 mil unidades, que tuvieron una difícil acogida comercial por lo revolucionario del concepto planteado por el ingeniero aeronáutico Corradino D’Ascanio.

Su nombre inicial fue MP6, pero se adoptó el que hoy conocemos cuando el empresario Enrico Piaggio exclamó «Sembra una vespa!» tras escuchar el peculiar sonido de su motor, que debía recordar al zumbido de una avispa (vespa, en italiano). Por esta y otras razones, la 98 es una de las clases de vespas antiguas que mejor representan a la marca del Grupo Piaggio.

Vespa Primavera: un escúter incombustible

En 1968, la Vespa Primavera fue presentada en sociedad como una versión mejorada de la 125 Nuova. Contó con una producción inicial de 240 mil unidades. Casi una década después, este modelo evolucionó hacia la Vespa Primavera ET3, que marcó un antes y un después por el uso de arranque electrónico. Su popularidad no la privó de ser discontinuada en 1982. Pero este no fue un adiós, sino un hasta luego, pues en 2013, Vespa decidió resucitar este modelo con tecnología de vanguardia y una unidad de potencia más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.

Vespa 50: una versión da ragazzo

Otro de los tipos de vespas clásicas vería la luz en 1964. La Vespa 50 se planteó como un modelo de baja cilindrada, dotado de motor rediseñado con una inclinación de 45 grados. En prueba de su popularidad entre el público joven, esta unidad no ha dejado de fabricarse desde su aparición, y se estima que 3,5 millones de vespas 50 han sido producidas desde entonces. Como anécdota, vale la pena recordar que el diseño de este escúter fue el último de Corradino D’ Ascanio.

Vespa 125: las más innovadora

El avance más rompedor de Vespa llegaría tempranamente, en 1958, cuando la marca propiedad del Grupo Piaggio lanzó al mercado la Vespa 125. Este salto de los 98 cilindros hasta los 125 anunciaba grandes mejoras en las prestaciones de esta escúter, dotada de una carrocería pionera creada con dos semicarcasas de chapa, los mandos ocultos dentro del manillar y otras innovaciones que posicionan a la 125 como una de las mejores escúteres de todos los tiempos.

Vespa GS: el escúter más bello ¿del mundo?

Siempre se ha dicho que «para gustos, los colores». Pero la marca italiana es en muchos sentidos un verso suelto, y por ello puede hacerse una excepción en el sector de la moto con la Vespa GS VS1T o simplemente GS, considerada por muchos como el escúter más bello del mundo. Fue presentada en 1955 bajo la denominación de Gran Sport (GS). Pensada como un modelo deportivo, superaba los 100 km/h y contaba con una transmisión de 4 marchas y un depósito de 12 litros bajo el asiento.

El éxito de la Vespa GS reside, dejando a un lado su irresistible estética, en la implementación de prestaciones y avances testados en las vespas Sei Giorni, el particular ‘caballo de carreras’ de la marca de Piaggio. En otras palabras, la GS era mucho más que una ‘cara’ bonita, sino que escondía una potencia y velocidad superiores a cualquier otra escúter del mercado.

Vespa Dalí: un raro tributo al artista gerundense

Salvador Dalí no sólo influyó en el diseño del logotipo de Chupa-Chups. También contribuyó a la creación de la Vespa que lleva su apellido. En 1962, los estudiantes Santiago Guillén y Antonio Veciana visitaron a Dalí en una Vespa 150, sobre la que el famoso pintor decidió estampar su firma y el nombre de su esposa, Gala. Posteriormente, la escúter autografiada por Dalí fue expuesta en la edición de 1999 de Eurovespa. Pese a no ser un modelo en sí, sino una unidad personalizada por el artista gerundense, justo es citarla en esta tipología de vespas que marcaron época.

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